Se lanzó al pornomundo en verano de 2010 y aunque no llamó especialmente la atención del grueso de pornófilos, algunos cayeron prendados de su belleza típicamente norteamericana. Posiblemente fue esto mismo lo que no le permitió sobresalir demasiado, pero Tasha no se desanimó y siguió aceptando trabajos graduando muy bien la cantidad de carne que echaba en el asador. Empezó con lésbicos y vídeos mastrubatorios, siguió con algo de bondage sin sexo completo, empezó con los faciales y ahora ya se atreve a solas con actores masculinos, permitiendo incluso creampies vaginales en uno de los coños más bonitos que recuerdo, como en este polvo en plan intimista, que insiste en su mimética propuesta x-artiana.
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