Convertida ya en una pornógrafa experta que dirige y produce a la vez que actúa, Dana Vespoli está en el mejor momento de su carrera en la industria y en Evil Angel no parecen precisamente disgustados con la prolífica exmujer de Manuel Ferrara ni con la diversidad de su obra, capa de abarcar subgéneros tan dispares como el gangbang interracial y el glamcore. Una de sus mejores escenas del año ocupando ambos lados del objetivo fue un lésbico autoritario en el que la exuberante cuarentona se comía viva a una Presley Hart entregada.
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